martes, 5 de mayo de 2015

La vida de un pájaro



Al observar tus fotos la distracción se disipa. Aparece
un frutero que avanza entre sombras
hacia un jardín. Uvas de Sicilia, uvas de Bengala
y naranjas podridas traen la luz.
Un pájaro jaspeado respira desde los árboles atrás
como mancha de sol. La luz expande
un amanecer oscuro aquí.
Los bizantinos solían llegar a los campos
huían de las ciudades como ante el llamado
de un dios. Siempre una mansedumbre de fieles
protagonizaba el agobio.
En el Gothic Universal donde se publican
otras fotos tuyas se explica esto a través de imágenes
y una leyenda fluye como río natural.
Pero quien abra ese libro verá renacer
la tristeza y la culpa.
Quien sangra, renace, pareciera decirnos
el pájaro que canta desde el jardín y se alza
como cristo crucificado.
Sin embargo, todo es barro, escritura en los muros,
acercamiento a lo prohibido. Sí, parece
como si en las obras de arte
los hombres hubieran venerado el templo y hecho ahí
la representación del dolor.
Pero otra es la lectura. El pájaro con sus alas medio
deshechas brilla ante el florero y no es sino la leyenda
del libro o el fresco
de una catacumba de San Sebastián.
Caen o parecen caer los residuos de un florero verde.
He ahí la fragilidad y el despertar de un mundo
escondido tranquilamente en sus asuntos.
He ahí la sucesión de las guerras que amenazan.
Son uniformes los colores, los pasteles liberados
como sombras cuando avanzan
y la luz comienza otro recorrido.
Desde arriba hay jaulas abiertas, y el pájaro aparece
como nuestro intento de salvar las cosas.

De: Moridor & otros poemas (2009)


Willy Gómez Migliaro (Lima, 1968). Es autor de los libros de poesía Etérea (Hipocampo Editores, 2002), Nada como los campos (Hipocampo Editores, 2003), La breve eternidad de Raymundo Nóvak (Hipocampo Editores, 2005), Moridor (Pakarina Ediciones, 2010); Construcción civil (Paracaidas editores, 2013) y Nuevas batallas (Arteidea editores, 2013) Compilador del libro OPEMPE, relatos orales asháninka y nomatsiguenga (2009).

lunes, 27 de abril de 2015

1 [Dríades]



A la sombra selvaggia canto silente
Quietud amena transparencia de
La orilla su son en avanzada sol

De súbito sobre la grama en
Soledad & la corriente hacia
Dónde va todo es verde en trozos

Refulgentes melódicos silbidos
Que no acierto a descifrar los
Gansos-bebé en fila india surcan

La clara superficie marrón & la
Canción se hace brisa en los
Guijarros translúcidos al repliegue

De las ondas mínimas concéntricas
Mientras la estela vibra imper
Ceptible una pequeña bahía es

Luz inusitada sobre el césped
Arboles plenos de verdor aves
De pecho naranja iluminación oh


Diminutas albas mariposas a ras
Del colibrí sombra otra vez acae
Cida en la Natura que me in

Vade el corazón & lo paltea


[De Cooper River Orillas Sección I / Sylva, Del Centro Editores, Madrid 2015]


Roger Santiváñez, poeta, integrante del grupo Kloaka. “Dolores morales de Santivañez" (Asalto al cielo, 2006) es la antología que recoge su poesía de 1975 al 2005. Actualmente reside en los Estados Unidos.

viernes, 24 de abril de 2015




Lo que acontece es una radiación de flor amarilla en los ojos idos y revive a los juguetes de la infancia, un esperma niño en fértil retorno a las andadas interiores.  Prende sonrisa la luz y el asomo invita a las ventanas a hacer una fiesta callejera en la habitación de los mayores. Prende la flor y se enraíza en tu deseo de agua. Ganas de portarse mal, galopar en una infantería marina y volverte tribu de niños perdidos  jugando a brillar en su casita de arena.




Virginia Benavides, poeta, performer y activista social. Ha publicado los poemarios: Esxtrabismo y Objeto sueños de un bonzo.

martes, 14 de abril de 2015

Mi hijo y el mar


1

Sobre las arenas recién descubiertas quedaron vasijas. Dentro de ellas un líquido espeso. Allí puede mirarse pagando con un creciente escozor de los ojos. El humo de cada vasija únase en un solo humo, el líquido de cada vasija es el pie común de todos los humos. Es una crineja de un solo humo tejido hacia arriba que sujeta el planeta a los tiempos de la combustión y los espasmos.


2

He sido señalado como el originador de las cópulas sólo por haber ensartado folios borroneados con mis manos inexpertas.


3

Ahora vengo a las playas como veraneante y traigo conmigo a Roberto para explicarle el surco que tracé arrastrándome y tratar de describirle la crineja de humo. El me mira apenas un momento y luego me deja para jugar con la arena mojada de mar. Yo miro su pie y sonrío.


Teódulo López Meléndez (Venezuela), poeta, ensayista, novelista, traductor de poesía. Ha publicado más de 40 libros. Participó en el reciente Festival Internacional de Poesía de Lima (2013).

lunes, 13 de abril de 2015

A Katty a Kasa



Como extraña a la dulce Katty
la pequeña niña de colas,
cargando lodo en sus zapatos,
vestida de su piel,
vestida de nieblas,
vestida de dolor.

Con su grandes ojos volando,
cerrados
vendados, azules, deliciosos.

                     -Mi doktor Jekyll-

La pequeña agrandada Katty
presa de las bohemias
deleznable dama
azul
llenas de evocaciones lejanas.

                   Llora
con las luces nocturnas del cielo
mi cielo
-celeste-
rojo amapola. Cosmopolita.

La del hipopótamo.
Rosa, amarillo burgués.
Dueña de su abultado monte FÉRTIL
adocenado
de las noches turbias
de las desnudes triste cansada
-blanca bella manchada linda ajada-

El suave olor de los libros de[lirios], vergüenza…
Renace la dulce Katty noctámbula
candorosa
prolífica
dueña de mi barro
dueña de su óleo y de las piedras.

Caídas
Marchitas
Frías
Ajadas.

Omar Acedo, nacido en Huacho. Egresado Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, facultad de educación de la especialidad de lengua, comunicación e idioma inglés. Actualmente se desempeña como docente